Ahora los Gen Z le ponen más énfasis a los ingredientes y reputación por encima del nombre o estatus de las marcas. Los grandes de la belleza se están quedando atrás con la creciente demanda por ingredientes más éticos y de calidad.
El consumer awareness sumado al boom del ‘self-care’ ha logrado que muchos Gen Z pierdan el interés por las beauty brands de renombre. El internet ha transformado la experiencia de compra e investigación alrededor de la belleza y el skin care.
Connection Makers
Las marcas que se están adaptando a este cambio, implementaron la clasificación por ingredientes, por función e incluso por tipo de piel. Logrando así una experiencia de compra más transparente y personalizada.
Adicional al Social Listening de estos cambios de prioridades también es súper importante tener en cuenta las plataformas como TikTok, donde los Gen Z pasan 35% de su tiempo online.
Estée Lauder es una de las marcas que se ha mantenido al tanto del comportamiento, necesidades y dudas de su audiencia más joven en TikTok.
Para las marcas, crear una tendencia viral es la forma más rápida de crear conciencia y posicionarse como referentes del beauty community.
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Fuente: Vogue Business
